lunes, 21 de octubre de 2013

LOS EXTREMOS DE LA MÚSICA MEXICANA


Cierra el Festival Quimera con Lila Downs y Aleks Syntek.
Casi tres horas de música clausuran la edición 22 del Festival de Arte y Cultura de Metepec

Pueblo Mágico de Metepec, Estado de México, 21 de octubre de 2013. Como en ninguna otra presentación del Festival Quimera 2013, ésta resumió gente: en los pasillos, en la explanada que linda con la fuente, en el Portal Unión, en todos los espacios posibles, la gente se acomoda, se junta en el espacio que les permite ver y escuchar a Lila Downs y Aleks Syntek, dos extremos de la música mexicana anunciados para clausurar este festival. Faltan 55 minutos para las nueve de la noche y ya no cabe nadie más en la Plaza Juárez de Metepec, Estado de México.

Quizás sea el concierto, quizás el gusto de asistir al cierre del festival que a lo largo de 11 días realizó 370 actividades para 380 mil asistentes en 42 foros. Un ejemplo de coordinación entre artistas, organizadores y público.

Por fin, antes de la hora, en punto de las 20:53, inició el concierto, dividido en dos partes, a la primera de la cual acudió Lila Downs, ataviada con falda choule y blusa zut, de la región de Huautla, en Oaxaca, para desplegar un programa de música mexicana que comenzó con “Mezcalito”, de su álbum "Pecados y milagros", de 2011, para seguir con “Tu cárcel”, de Marco Antonio Solís, que sorprendió al público porque la interpretó suave y delicadamente, para otorgarle una dimensión más profunda, que sus músicos entienden muy bien: Paul Cohen en el sax y la dirección musical, Ángel Chacón en la guitarra, Giovanni Buzzurro en el bajo, Moisés García en la trompeta y Paty Piñón en las percusiones.

“Los pollos”, un son; “Naila”, una cumbia… El repertorio de Lila Downs se desenvuelve con naturalidad en el escenario, iluminado por su voz que toca las fibras íntimas del público exigente de Quimera. Los ritmos del reggae se mezclan con las ideas sobre los temas urgentes de la nación, que también adora el género ranchero, se emociona con la interpretación de “Fallaste corazón”, del inolvidable Cuco Sánchez, y “Vámonos”, de José Alfredo Jiménez, “Cucurrucucú paloma”, de Tomás Méndez.

Un deleite que nadie quiere dejar de escuchar. Pero todo termina, y Lila Downs, después del concierto que termina a las 10 horas en punto, para dar paso al concertista que también se espera esta noche: Aleks Syntek.

El otro extremo

Aleks Syntek pertenece a otra realidad de la música. Y son otros los gritos que lo reciben a las 10:26 de la noche, cuando aparece en el escenario, enfundado en un pulcro traje negro, con anteojos luminosos de azul intenso. Inicia con “La Tormenta” y el público se le entrega, en un baile que sigue el ritmo de las tarolas que él mismo ejecuta y el piano pintado a mano que se distingue en la iluminación intensa del escenario.

Sigue con “El Camino”, “Sin motor”, “Sólo el amor nos salvará”, a dueto con Tyna Ros, que compite por el Grammy Latino de este año; le sigue “Hasta el fin del mundo”, para un público que ya está de pie y no se pierde ninguna de sus interpretaciones.

Le siguen “Loca”, “Historias de danzón y de arrabal”, “De noche en la ciudad”, con pasos de break dance mirando a su primera fila, donde está la prensa. “Te soñé”, quizás la más popular de sus composiciones, para continuar con “Duele el amor”, acompañada de su corista y bajista Gabriela Vega.

Los gritos y vivas de reconocimiento son la muestra de la identificación que Aleks Syntek ha logrado con el público que asiste a la clausura de este Festival, y que canta con el artista los éxitos “Sexo, pudor y lágrimas”, “Lo que tú necesitas”, “Intocable” y que finaliza, en un concierto memorable, con los temas “Por volverte a ver”, “Una pequeña parte de ti” y “A veces fui”.

Es casi la medianoche. El Festival Quimera 2013 termina y los ecos de cada una de las 11 noches que antecedieron a ésta quedarán grabados en la cantera que cuenta las horas para el próximo festival de Metepec, el festival de la gente.